El gringo loco
2007. La música lo había llevado al periodismo. Mejor dicho, el heavy metal y su afán por difundir a los exponentes locales lo condujo a estudiar la más noble y vil de las profesiones 16 años atrás. Por eso, la obsesión por obtener la primicia o caer en el facilismo del sensacionalismo nunca lo sedujeron. Nunca fue un sabueso de la noticia ni un empedernido hombre de prensa. Más bien, descubrió, con el paso del tiempo, que lo suyo era contar historias, expurgar sus demonios internos y tirar un cable a tierra. Francisco había pasado por algunas redacciones de “prestigiosos” diarios y ahora se encontraba en el “nuevo producto” de la más importante casa editorial del país. Luego de pasar por la sección deportiva, recaló en la de Internacionales. La mañana del 16 de abril el mundo amaneció conmocionado. Una nueva matanza en un centro de estudios golpeaba por enésima vez Estados Unidos. El trágico saldo: 33 muertos y 29 heridos. La redacción del diario estaba alborotada tra...